Pocos viernes por la noche me veréis cenando en Madrid. El fin de semana suelo disfrutarlo en casa, con niños y amigos por los que… cocinar me resulta una bendición. Pero si mi amiga Alexandra Sumasi me dice que tengo que conocer una taberna de nuevo cuño y me cuenta que sus fundadores, Carmen y Santiago me van a conquistar y que además voy a compartir mesa con mi querido colega Alberto Granados, autor de “Planeta en Conserva” y con mi amigo Lady de Cárnicas Lyo, uno de los insuperables proveedores de carne que abastece a la Taberna, la cosa cambia. Si además esa noche de viernes mi inseparable Miriam de las Heras se anima a acompañarme, deduzco que la alineación de planetas se ha dispuesto para que me decida a trastocar mi habitual retiro del fin de semana y que me debo subir al tacón. Por cierto, cada vez menos alto!
Para altura, la de la calidad de los productos que seleccionan después de muchos viajes y pruebas, Carmen y Santiago, un matrimonio que ha decidido reinventarse tras muchos años dedicados profesionalmente al turismo. Anchoas, cecina de vaca, huevos, morcillas, mejillones, carne… todo tiene nombre y apellidos que garantizan la excelencia y la tradición.
La tortilla al estilo de betanzos es una emoción contínua y está hecha al momento! con patatas nuevas, impregnadas de brisa marina gaditana y huevos recién puestos por gallinas gallegas y felices.
Los mejillones tigre también son una obra de artesanía gastronómica, como las anchoas sanfilippo con mantequilla atemperada para guiarnos por una nueva experiencia sensorial.
Las minihamburguesas de dos carnes de buey con maduraciones extremas de cárnicas Lyo entre panecillos hechos expresamente por el Museo del Pan Gallego, trastornan y teletransportan a parajes irreconocibles.
De la quesada pasiega qué decir, si hasta elabora Carmen el queso fresco pasiego a partir de leche de vaca recién ordeñada…Santiago nos la ofrece como un tesoro, templada y mientras nos la cuenta, se nos hace la boca agua como si hubiéramos olvidado que el festín ha comenzado hace dos horas con unas croquetas de jamón ibérico de bellota…una cecina sin nada más que ella misma, porque ella lo vale, una ensaladilla como la de mi madre pero presentada con bellos pétalos de flores comestibles, unos huevos con pisto para quitar el sentío y hasta la morcilla de cebolla vasca que tantas alabanzas recibió de todos los comensales.
Taberna Pedraza, Bienvenida y bienhallada! Raíces de nuestra tierra, en la calle Ibiza de Madrid.
Taberna Pedraza, Ibiza 40
910327200 info@tabernapedraza.com